Con total independencia y cero presiones del mercado, con todo el tiempo para crear y grabar en su casa estudio, totalmente alejado de las modas y los dictados de la depredadora industria musical de usar y tirar, de “colabos” forzadas por intercambio de seguidores, Paco Román entrega una gran obra, compuesta de ocho canciones que podrían ser un solo disco cada una.

Porque Neuman trabaja cada canción como si se tratara de un álbum, creando un ambiente propio para cada una, amueblando el estudio según pida el paisaje de la canción y tocandola todos a la vez. Por supuesto, en cinta analógica.

Aunque sea algo habitual en el catálogo de Neuman, ‘Waterhole’ incluye canciones especialmente extensas (ninguna baja de los cuatro minutos y hay temas de siete y ocho minutos), en plena expansión creativa que propicia el remate épico de algunas seleccionadas, dándoles tiempo para crecer y argumentarse con grandiosidad. Una obra representativa de la propia motivación que siempre ha guiado su música, iniciada con esa “Recovered Files” capaz de rememorar al instante las especificidades y virtudes de la banda en cuestión, a través de una pieza que apuesta por melodía inquieta y definitivamente rota en base a guitarras afiladas y distorsiones.

Por su parte, “The City Of Love” es un clásico instantáneo dentro del repertorio de los murcianos con su estructura pegadiza recordando a The Beatles y Oasis, mientras que el irresistible single “George” destaca con texturas algo diferentes. También cuentan como aciertos “Three Of Us” –delicado corte iniciado con piano y que deriva en contundente amalgama sonora–, la sentida “Baby The Sunrise”, la solemnidad casi religiosa de  “Untitled”, o “Waterhole” dando título a la referencia y ejerciendo como bellísimo cierre.

‘Waterhole’ es un disco dotado con la más pura esencia de Neuman: detallista, cálida y que luce una brutal capacidad emotiva como manifestación principal y, al mismo tiempo, es también condición primigenia e indispensable del proyecto. Una suerte de cualidades creativas y sonoras (con Paco Román ejerciendo en modo cantante, compositor, multiinstrumentista y productor) que hace que cualquier canción con la firma de Neuman resulte reconocible casi al instante, motivada por esa identidad artística tan fuerte que aquí vuelve a brillar con fuerza.

Definitivamente, lo imperdonable sería no haberles echado de menos”.


NEUMAN

“ Seis años después de Crashpad (Subterfuge, 2017) Neuman publica «Waterhole», su mejor disco, y devuelve a los escenarios uno de los directos más apabullantes vistos en una gira. Quizá no éramos del todo conscientes, pero resulta que se echaba mucho de menos a  Neuman. Y, ahora que el combo regresa con esplendoroso nuevo trabajo bajo el brazo, se hace latente cuán necesarios resultan dentro de la escena patria. Entregan ocho nuevas composiciones trabajadas (una vez más) con mimo y que apuntan a la atemporalidad, alejadas diametralmente de aquella inmediatez del aquí y ahora latente en buena parte del negocio. Raúl Julián (Mondo Sonoro)